Origen de las marcas
«Las marcas no son algo moderno, sino que tienen siglos de historia. Se han utilizado desde los inicios del comercio para la diferenciación de los productos. Ya en los años mil quinientos a mil seiscientos, los productores de licores grababan sus nombres en los barriles para diferenciarse, evitar la adulteración y garantizar su calidad. Hoy, una marca va mucho más allá de un simple nombre o logotipo: representa la esencia de una empresa y cómo se conecta emocionalmente con sus clientes.»
Antiguas cerámicas
De la misma manera se refleja en las cerámicas de hace dos mil años. Las marcas han existido desde el inicio del comercio para diferenciar productos. Esto queda evidenciado en las cerámicas de antiguas civilizaciones romanas y griegas que hasta la fecha se pueden hallar en la región del Mediterraneo. Estas piezas suelen llevar marcas (símbolos) en su base, impresas cuando aún estaban frescas. Los alfareros usaban símbolos como peces, estrellas o cruces para identificar su trabajo. Estas marcas no solo indicaban el origen y la calidad de los productos, sino que también diferenciaban a un alfarero de otro. Cabe resaltar que estos primeros usos de marcas incluían texto (nombres o iniciales) así como símbolos, lo que colocaron las bases para los logotipos modernos. Un ejemplo es una lámpara romana de aceite del siglo I dC, que lleva la marca «MNOVIVSTI» junto a un círculo con dos circunferencias concéntricas. Otro caso es una lámpara del 175-225 dC, con la marca «LVCCEI» y un logotipo de un disco elevado con dos óvalos.
